Hace casi un año, el 19 de junio de 2014, terminaba uno de los mecenazgos más exitosos que una servidora ha podido ver en España:
«Vampiro 20 Aniversario». Cerró campaña acumulando la sencilla suma de 178 123€. Aquí es nada.
A una semana de terminar el que sería su décima recompensa, la publicación de Hombre Lobo (algo de lo que daría que hablar largo y tendido: ¿hasta qué punto es lícito hacer de algo que se va a hacer, porque os va a salir económicamente rentable, un mecenazgo?), creo que hay lugar una pequeña reflexión. Como dice el título: su escaso éxito.
No hace falta decir que es un escaso relativo. Sin duda, 71 921€ es una cantidad nada desdeñable. Especialmente si lo comparamos con algunos de los mecenazgos que ha habido en el tiempo de en medio (
Walhalla llegó a los 24 623€;
Espada Negra a los 15 905€;
Jernhest 11 433€;
Icons 5418€;
Triumphant! 5297€;
Islas Natales d20 no consiguió fundarse… En la actualidad tenemos a
Campeones de Verne, que se vio obligado a retrasar su mecenazgo para no competir con Hombre Lobo, luchando por salir a delante). Sin embargo, no ha conseguido superar el triunfo de su hermano mayor. Y no lo conseguirá. Ni siquiera llegará a la mitad de esos 178 123€.
Quiero analizar, de forma breve y quizá demasiado personal, por qué Hombre Lobo 20 Aniversario no ha llegado a ser un rotundo éxito que se podría haber esperado. Y, quizá, adentrarnos en por qué Mago tampoco lo será.
Como mucha otra gente, participé en el micromecenazgo de Vampiro y, aunque jamás me he sentido muy afín a Hombre Lobo, hasta que salió a la luz el pasado 28 de abril me planteé adquirirlo. En parte por coleccionismo; en parte porque como parte de una de las recompensas del anterior era un código de descuento del 5%. Incluso durante las primeras horas me planteé apuntarme (especialmente ahora, que estoy de prácticas y tengo un «sueldo»); en parte por apoyar a Nosolorol, que lo está haciendo genial en la selección y producción de rol nacional. Pero el subidón duró poco.
Pero, ¿por qué?
En principio, ya os lo he dicho: Hombre Lobo no logró ser tan popular como Vampiro. Y esto no es culpa, ni por arriba ni por abajo, de Nosolorol o de la Biblioteca Oscura. Tiene sus fanáticos, claro. Yo misma fui testigo de esos primeros momentos en el que hubo una cuádriple
Tríada (y me arrepiento profundamente de no haberle hecho una captura de pantalla).
Pero no solo se limita a eso, claro.
Creo que parte del problema radica, a su vez, a unas formas que han tenido desde la cara comercial de Nosolorol y, quizá, de la Biblioteca Oscura. En parte las formas, en parte las estrategias. Y es que parece que se han olvidado que un mecenazgo no es lo mismo que una precompra. O, por lo menos, no debería serlo.
Si, a los mecenas de Vampiro se les ofreció un 5% de descuento. Un descuento que únicamente les ha salido rentable a aquellos que, en sí, han gastado un buen dinero en el mecenazgo. Para todos los demás, el precio del libro ha subido porque «llevan la marca de la garra troquelada en la cubierta y este es un efecto bastante caro de producir». Es cierto que
en el Kickstarter americano el libro básico costaba 55$ (que no os engañe Edge. El cambio del euro al dólar no está a uno-uno). Quién sabe, el precio podría estar establecido por contrato. O quizá no. También cabe señalar que ignorar que producir EEUU no es lo mismo que España sería un error, pero aun así la impresión que te cala cuando lo lees no es esa.
Y esta no desaparece cuando sigues leyendo las Preguntas Frecuentes. La desafortunada expresión ante la pregunta del nivel mortal («el valor de las recompensas de este nivel era mayor que el propio precio del nivel, lo cual no tiene sentido». Con lo elegante que habría quedado algo así como «si se recauda lo suficiente para que sea viable su producción, sí». Aunque no fuera a alcanzarse. Aunque no llegara a ser viable) vuelve patente ante lo que estamos.
Es que, de pronto, ya no consiste en ayudarles a producir un juego. De pronto se torna en una precompra con ciertas recompensas por participar en las que parece que se intenta aprovechar el filón que dejó Vampiro. Y, aunque las comparaciones son odiosas, no se puede evitar volver la vista atrás a mecenazgos como los de Walhalla con recompensas cada 1000€ o Espada Negra, que las mantuvo entre los 1000 y 2000€. O cualquiera de los anteriormente mencionados arriba.
Y es ahí donde creo que está el problema. Al que quería el libro le va a dar igual: es una oportunidad única para llevarse un par de extras a casa. Al que se dedica a apoyar con su granito de arena los mecenazgos buscando apoyar el éxito de proyectos (como es el caso de una servidora) les han espantado. Es evidente que los señores de Nosolorol y de la Biblioteca Oscura tienen que comer. Es evidente que la producción y los derechos tienen un coste. Pero así no.
Personalmente no participaré en el mecenazgo de Hombre Lobo (del que de verdad espero que llegue a esos 80 000€, por todo el trabajo que está detrás y especialmente por todos esos mecenas). Y mucho tendría que cambiar la cosa para participar en el de Mago.
Otro día seguiré hablando de la cara comercial de Nosolorol. Y, quizá, me anime a criticar el ya pasado mecenazgo de Vampiro con la perspectiva del tiempo. Pero por hoy ya me he extendido demasiado.
Llegados a este punto, solo me quedan decir dos cosas: gracias si habéis llegado hasta aquí y ¿vosotros qué opináis?