Fuente:
http://www.sinergiaderol.com/novedades.html
Hoy, 30 de junio de 2015 es el primer cumpleaños de Iván... sin Iván. Iván Mata Portugués fue, entre otras cosas, un jugador de rol español conocido en internet como «Otto Rangstar», pseudónimo que se había dado él mismo por ser el nombre de un personaje (un enano) que se había creado para el juego de rol
Warhammer... aunque su juego de rol favorito siempre fue
La llamada de Cthulhu, el primero al que jugó. Hoy 30 de junio de 2015 Iván hubiese cumplido 45 años de haber estado con vida, pero falleció el pasado 6 de febrero. Era padre y marido, y su esposa y su hijo no lo olvidan... como tampoco lo olvidan los lectores de su blog rolero (
La cueva de Otto Rangstar) ni sus amigos más próximos. Dos de entre estos últimos, sus amigos, sus compañeros de mesa y de aventuras, son Pedro Nieto y Anakleto. Pedro y Anakleto han rendido homenaje a la memoria de Iván añadiendo una nueva entrada en su blog, pues Anakleto está habilitado para editarlo. Además, tras un sentido homenaje fúnebre de Pedro, Anakleto ha dejado el suyo propio, pero también ha dejado una aventura descargable de Iván que él mismo, Anakleto, ha terminado, pues Iván la había dejado inacabada. La entrada de homenaje de Pedro y Anakleto está accesible
directamente en este enlace, aunque también puede probarse
este otro por si el primero no funciona. La aventura se titula
Apocalipsis, utiliza el sistema de reglas de
CDB Engine y se ambienta en el universo del videojuego de rol
Fallout 3. Pedro y Anakleto estiman que dar continuidad a la labor de Iván, jugando sus aventuras, es la mejor manera de obrar para que no se le olvide nunca. En la Sinergia del juego de rol estimamos que tienen mucha razón.
En la Sinergia pronto pondremos una página recopilatoria con todas las aventuras que Iván nos transmitió. Habrá una treintena más o menos, lo cual no está nada mal... así que gracias Iván, gracias Anakleto y Pedro, y gracias a toda la afición. Esta afición de los juegos de rol, bien comprendida, es en realidad muy bonita, muy humana y muy enriquecedora. Si Iván nos deja, nosotros la continuaremos por él. Y para cuando nos hayamos ido nosotros, esperamos que otros la comprendan como nosotros la comprendimos... y la continúen también ellos a su vez.
Hasta pronto con las aventuras de Otto Rangstar.